1. Realidad femenina en el emprendimiento 

La desigualdad entre mujeres y hombres está presente en todos los ámbitos de la sociedad y en el emprendimiento no es diferente. En España, solo el 14% de las personas que han fundado su startup son mujeres, según el Informe del emprendimiento digital femenino, del Instituto de las Mujeres, en colaboración con W Startup Community. 

De acuerdo con el Informe GEM (Global Entrepreneurship Monitor) España 2020 - 2021, la decisión de emprender es influenciada por factores objetivos como la información disponible sobre otras alternativas laborales accesibles, experiencia previa, situación laboral o su nivel educativo, bien como por factores subjetivos como la percepción sobre sus valores y aptitudes para emprender, así como la cultura asociada al emprendimiento.

En 2019, el informe GEM resaltó que la brecha entre la Tasa de Actividad Emprendedora (TEA) femenina y masculina en España había logrado un mínimo histórico y que se acentuaba una reducción continua desde 2013. Sin embargo, el advento de una crisis sanitaria fue suficiente para que en 2020 la brecha de género en el mundo emprendedor volviera rápidamente a niveles de 2018, pero aún más preocupante fue que el nivel de actividad emprendedora femenina presentó una regresión a los niveles de 2016; un año de crisis, echó a perder 5 años de progreso. 

Queda claro que los esfuerzos emprendidos en cerrar la brecha de género carece de bases estructurales más desarrolladas para que esta diferencia no vuelva a aumentar. 

Más allá, el informe destaca que, igual que en años anteriores, las mujeres presentaron un perfil más conservador que a los hombres, percibiendo menos oportunidades en su entorno, presentando más miedo al fracaso y valorando menos favorablemente la cultura emprendedora de su entorno.  

El miedo al fracaso constituye un factor que limita la decisión de emprender. El riesgo de no recuperar el dinero invertido en un nuevo negocio a menudo detiene iniciativas emprendedoras con potencial de crecimiento. En el año 2020 el 68,1% de las mujeres percibió que el miedo al fracaso les impediría poner en marcha un nuevo negocio, frente al 63,3% de los hombres. 

Cabe destacar que la motivación también se presenta de manera diferente, mientras que el 41% de los emprendedores hombres tienen interés en que sus negocios les permitan crear riqueza y rentas altas, sólo el 27,6% de las mujeres piensan igual. Según el informe Ellas Deciden 2018, cerca del 55% de las mujeres coincidían con que la innovación era un importante motor para la creación de empresa, mientras que más del 50% encontraba en la propia gestión del tiempo y en no tener ‘cadenas corporativas’, suficientes razones para aventurarse a emprender. 

Esto podría ser una de las razonas por las cuales, en Mapa del Emprendimiento de South Summit 2021, uno de los eventos más renomados en el mundo emprendedor Español, el 80% de los emprendedores participantes eran hombres, porcentaje que se mantiene similiar a lo largo de los años. 

Figura 2. Fuente: South Summit 2021: mapa del emprendimiento 

Las distintas motivaciones para emprender, percepciones del mercado, niveles de miedo al fracaso entre hombres y mujeres tienen múltiplas justificaciones. El manual de buenas prácticas “Emprendimiento con Perspectiva de Género” publicado por la Diputación Foral de Bizkaia, destaca factores sociológicos que influyen en la perpetuación de la brecha de género en el emprendimiento: 

• Los roles de género asignados a las mujeres: la socialización diferenciada entre niños y niñas, en la que las niñas son enseñadas la sumisión, el conformismo, el cuidado, al contrario de los niños, afecta la confianza de las mujeres en ellas mismas a la hora de emprender. 

• La falta de apoyo del entorno social: desde el apoyo familiar, pasando por la falta de visibilidad de emprendedoras de éxito en los medios de comunicación, hasta la falta de inversión financiera en emprendedoras, influyen en la autopercepción de ellas mismas con respecto a su capacidad de iniciativa, liderazgo y autoestima laboral. 

• La conciliación laboral y familiar: al considerar las mujeres se encargan del 75% de las labores del hogar, del cuidado de niños y de los mayores, según asevera el estudio “la masculinización del tiempo dedicado al trabajo doméstico rutinario”, publicado en la Revista Española de Investigaciones Sociológicas, es irrefutable decir que las mujeres y los hombres empiezan de distintas bases para emprender. 

• El tradicional modelo empresarial como referente: la falta de visibilidad de referentes diversos y de diferentes maneras de llevar a cabo un negocio resultan en muchas mujeres que no se sienten representadas ni identificadas con los modelos mostrados en los medios. 

• Escasa visibilidad del emprendimiento realizado por las mujeres: los medios de comunicación perpetuan estereotipos al dar visibilidad solamente al modelo de emprendimiento predominantemente masculino. Las emprendedoras carecen de modelos femeninos que les sirva de inspiración y motivación. 

Por estas razones y de acuerdo con el estudio “How does motherhood affect self-employment performance?”, los hombres entran en el proceso de emprendimiento en una fase mucho más temprana, al paso que las mujeres suelen tomar más tiempo para empezar su propio negocio. El estudio también indica que, en los países europeos, las mujeres generalmente toman la decisión de   autoemplearse con base en la familia, más que por razones económicas. 

En el caso de España, aunque se haya alcanzado una igualdad formal entre hombres y mujeres, las diferencias entre sueldos, horarios e inversiones siguen siendo dispares. Según el Instituto Nacional de Estadística, la brecha salarial aún se mantiene en los 16,2% , las mayores tasas de temporalidad son representadas por mujeres y el 70% de las perceptoras del salario mínimo son mujeres. Además, de acuerdo con el estudio realizado por Harvard Business School (Investors prefer entrepreneurial ventures pitched by attractive men), los hombres tienen un 60% más de probabilidades de obtener financiación para crear una empresa que las mujeres. 

2. Medidas para disminuir la brecha de género 

Queda claro que emprender impone más barreras a las mujeres que a los hombres, los cuales ya parten de una posición privilegiada, con bases mucho más favorables para arriesgarse a montar un negocio propio. Por esto el presente artículo se enfoca en las soluciones y medidas aplicables con el fin de cerrar o, por lo menos, disminuir la brecha de género en el emprendimiento. 

Es inegable que cerrar la brecha de género no es solamente un objetivo para garantizar un derecho fundamental y humano, si no que también es una solución económica. Acabar con la brecha de género en el empleo aumentaría el PIB de España en un 18,5%, según señala el primer informe “Closing Gap” de PwC. 

El “Informe del emprendimiento digital femenino”, del Instituto de las Mujeres, en colaboración con W Startup Community presenta, con base en su estudio, cinco recomendaciones para impulsar el emprendimiento femenino y disminuir la brecha de género, las cuales son: 

• Comprometimiento por parte de business angels a que, al menos, un 30% de empresas que financian sean creadas por mujeres. 

• Creación de programas específicos de formación para el emprendimiento dirigidos a mujeres.  

• Dar visibilidad en los eventos, ferias y medios de comunicación a las empresas formadas por mujeres, llegando también al menos a un 30%.  

• Creación o mejora de programas en las universidades para el emprendimiento femenino. 

• Creación de más redes potentes de mujeres emprendedoras y apoyo a asociaciones de emprendimiento femenino. 

En conformidad con lo anterior, el estudio “Education for Women Entrepreneurial Attitudes and Intentions: The Role of Perceptions on Gender Equality and Empowerment” (Hassan y Naz, 2020) ha concluido que, a través del debate y de la persuación, actividades educativas de apoyo al emprendimiento con perspectiva de género pueden redefinir las conductas relacionadas a los estereotipos de género, lo que puede incrementar su intención de desarrollar una carera de autoempleo. 

Es decir, la formación para el emprendimiento dirigida a mujeres es una medida eficaz para combatir la brecha de género, una vez que el conocimiento disminuye el miedo al fracaso y hace los roles de género irrelevantes.  

Por esta razón y para fomentar la cultura del emprendimiento con riesgos medibles y controlables, EAE Business School apuesta por ofrecer un Máster en Emprendimiento e Innovación y un área dedicado al emprendimiento, denominado EAE Emprende, que ofrece un programa lateral disponible para todos los estudiantes de másteres. Los participantes del programa reciben el apoyo de la escuela para desarrollar una idea de negocio y llevarla a cabo. Al fin del programa, los mejores proyectos son seleccionados para entrar en la pre-incubadora de negocios de EAE Business School. 

En el Máster en Emprendimiento e Innovación, percibimos que a lo largo de los años el interés de las mujeres por la formación para crear empresas es muy similar a de los hombres e, incluso en algunos años, superior. 

En el actual programa de emprendimiento que empezó en octubre de 2021 y termina en julio de 2022, contamos con 407 participantes inscritos, de los cuales el 46% son mujeres. Según la Figura 4, se puede ver la relación de mujeres y hombres en los últimos programas de emprendimiento. 

Más allá, EAE Business School también cuenta con un área, denominado EAE Invierte, dedicado a apoyar a startups en su crecimiento y búsqueda por financiación. En 2021, startups de diversos sectores recibieron el apoyo de EAE Invierte, como Healthtech, Proptech, Edtech e Impacto. 

Hoy, la mayoría de los co-fundadores de las startups sigue siendo masculina. Sin embargo, EAE Invierte mantiene un foco importante en las mujeres emprendedoras y como resultado, cuenta con 4 proyectos liderados exclusivamente por mujeres. 

2.1. Entidades Formadoras 

Es imprescindible considerar que diversas entidades se están moviendo y tomando medidas en dirección al cierre de la brecha de género en el emprendimiento. Coca Cola, por ejemplo, ha diseñado un programa de formación al emprendimiento 100% dirigido a mujeres. Bajo el nombre de Gira Mujeres, el programa que empieza ahora su sexta edición, suele recibir entre 3.000 y 5.000 candidatas por año.  

Según la gestora de proyectos, Elia Vela, las participantes de Gira Mujeres tienen un fuerte deseo de emprender y buscan al programa de formación, sobre todo, con el objetivo de adquirir los conocimientos necesarios para emprender. Vela resalta que el principal motivo para la creación de un programa dirigido solamente a mujeres es que ellas enfrentan más barreras a la hora de emprender y la formación las ayuda a vencerlas. 

En la misma línea, la Asociación Nacional Mujeres Emprendedoras Y Autónomas (ANMEYA) también ofrece cursos y talleres de formación emprendedora dirigidos exclusivamente a mujeres. Según Marta Bona Corbella, presidenta de ANMEYA, cerca de 700 mujeres suelen buscar cursos de formación anualmente, sobre todo con el objetivo de mantenerse actualizadas. Corbella destaca que por la falta de ofertas laborales, muchas mujeres ven el emprendimiento como una alternativa. 

Además, cabe destacar que la razón impulsora para ofrecer cursos de formación dirigidos exclusivamente a mujeres también es el hecho de que las mujeres enfrentan más barreras a la hora de emprender y la formación las ayuda a vencerlas. 

2.2. Business Angels 

Según el Business Angels 2020 de la Asociación Española de Business Angels Networks (AEBAN), solamente el 10% de los inversores privados de startups en España son mujeres. El desequilibrio de la participación de mujeres en posiciones de liderazgo y toma de decisiones no sólo afecta al segmento de Business Angels sino que también al de capital riesgo, tanto en fondos independientes como en fondos ligados a grandes corporaciones, donde el porcentaje de mujeres en puestos societarios no alcanza en ninguno de los casos el 15%. 

Además, de acuerdo con estudios de la Universidad de Harvard, los inversores prefieren los proyectos liderados por hombres, lo que resulta en un acceso mucho más facil para hombres que para mujeres. Esto sigue pasando, aunque estudios dirigidos por importantes entidades, como el Boston Consulting Group, ya hayan destacado que las empresas lideradas por mujeres obtienen mejores resultados que las dirigidas por hombres. 

Por esto son tan importantes las iniciativas dedicadas a la inversión hechas por y para mujeres, como son We Rock Capital o Women Angels For STEAM (WA4STEAM), asociaciones de mujeres que se dedican a invertir en otras mujeres. Según Helena Torras, fundadora de We Rock Capital, uno de los requisitos para que una startup sea elegible para recibir financiación es que por lo menos una co-fundadora sea mujer. En 2021, recibieron alrededor de 100 solicitudes de financiación, una cantidad mayor y creciente en comparación a los años anteriores. 

We Rock Capital nació con tres objetivos: 1) incrementar el número mujeres inversoras; 2) incrementar el número mujeres emprendedoras que consigan financiación; y 3) acercar el mundo tradicional y las mujeres ejecutivas al mundo emprendedor a través de "aprender implicandose". Esto cobra sentido cuando todos los proyectos financiados por We Rock Capital ya habían sido negados anteriormente por otros inversores. 

WA4STEAM, a su vez, nació con el doble objetivo de: 1) democratizar la inversión business angel aumentando el número de mujeres que participan en fases tempranas del ciclo de inversión; y 2) aumentar el número emprendedoras en STEAM, invirtiendo, visibilizando y creando rol models para inspirar a las próximas generaciones de mujeres a considerar la emprendeduría y las carreras científicas y tecnológicas como una opción de carrera profesional. 

En 2021, WA4STEAM ha financiado proyectos en diversos sectores, tales como Health, Med Tech, Bio tech, Saas, RH Tech, Robotics, Photonics, todos contando al menos con una mujer fundadora o co-fundadora. 

2.3. Visibilidad y Networking 

La investigación presentada en el Informe del emprendimiento digital femenino concluyó que muchas emprendedoras digitales se inspiraron en referentes familiares o en el entorno cercano para tomar la decisión de emprender. De la misma manera, la guía Mujeres Referentes del Emprendimiento Innovador en España busca dar conocimiento de mujeres emprendedoras a mujeres bajo la creencia de que cuando las mujeres conocen el ejemplo de otras mujeres, aumentan su confianza, su inspiración y su determinación. 

Para romper el ciclo vicioso de que la falta de referentes resulta en pocas emprendedoras y al haber pocas emprendedoras, hay pocas referentes, dar visibilidad a más mujeres y alentar que se conozcan y hagan networking es fundamental. 

Por esta razón, iniciativas como Womenalia, la comunidad profesional para la mujer; Female Founders Day, un evento para visibilizar y conectar referentes femeninos; #mujeresquetransforman, una comunidad de emprendedoras que promueven eventos sobre el emprendimiento femenino; e incluso eventos puntuales para mujeres que promueven grandes entidades del ecosistema, como La Nave, Wayra, Lanzadera, Órbita, los propios órganos del gobierno e universidades, son tan necesarios. 

3. Conclusión 

Es cierto que la mujer ha conquistado su espacio en el ámbito profesional a lo largo de las últimas décadas. También es verdad que en España las mujeres han logrado imponer la igualdad formal como derecho fundamental y humano. Sin embargo, aún queda mucho para conquistar la igualdad real plena.  

Las mujeres aún sufren las consecuencias de una educación y socialización enfocada en el hombre como protagonista y merecedor de las victorias. Hoy las mujeres siguen ganando espacio en sectores del cuidado y sobre todo ofreciendo servicios. Para llegar el día en que exista paridad en los sectores tecnológicos y científicos, bien como en posiciones de liderazgo y de toma de decisiones, queda un largo camino. 

Para cerrar la brecha de género, más iniciativas como las destacadas en el presente artículo deben surgir, ser impulsadas y promovidas por todo el ecosistema del emprendimiento. No es suficiente con que una mujer sea aceptada en el escenario, las mujeres deben ser mitad de los actores y actrices premiados. Ya sea la formación para romper los roles y estereotipos de género y para libertar la mujer de un segundo plano, la concesión de financiación para permitir que la mujer alcance su potencial, o promoviendo eventos y redes de networking para sacar las mujeres de los bastidores y darles su merecido lugar entre los protagonistas.